Volviendo al pasado / Oliver

Oliver alzo una ceja divertido al ver como el entrenador al ver que ambos, Julie y el, lo observaban, rápidamente se iba a conversar con otras personas, como si no hubiera estado haciendo nada. Negó con la cabeza mientras escuchaba a la chica y arrugaba el ceño para luego encogerse de hombros, seguramente nada importante, todos sabían como era el entrenador, siempre pensando en miles de cosas y preocupados por todos. El mismo lo sentía casi como un padre.

-Ya sabes como es…se le pasara-le dijo el muchacho a Julie mientras tomaba un poco mas de su refresco y hacia una pequeña mueca al sentir su rodilla y una pequeño pinchazo en ella, se la masajeo levemente antes de elevar la mirada nuevamente-Recuerdas es el baile…no te preocupes no diré el baile de graduación…-Se estaba permitiendo bromear con aquello, cosa que podía ser claramente una buena señal de que todo estaba superado, aunque realmente se estaba engañando a si mismo.-¿El baile de aniversario del pueblo?-No sabia porque aquel momento se le había venido a la cabeza, quizás por recordar al padre de Julie, pero ahí había sido cuando ella se había emborrachado por primera vez y juntos habían hecho todas las maniobras necesarias para escapar de los padres de la chica-Aun me lo debes…-agrego luego riendo suavemente.

- Lo se, pero es que… - fruncí la nariz volviendo a mirar a mi padre y suspiré negando con la cabeza, suficiente, no iba a pensar mas en lo que había dicho, quizás solo era imaginaciones mías y mi padre había hablado como en cualquier otro momento.

Al escuchar lo del baile realmente me vino el de graduación a la cabeza, varias imágenes mas bien, había ido con él a ese baile, ya que ninguno de los dos salía con nadie en ese momento y lo mas sensato era que fueran juntos, aunque tanto a él como a ella a él habían pedido otras personas, por suerte terminaron hablando sobre lo de ir juntos y así fue, aunque la noche no termino como ninguno de los dos imaginaba, negué con la cabeza para sacarme aquello de ella. – Faltan tres días, ¿quien te dice que no tengo pareja para ir? – bromee por supuesto, la verdad ese año había decidido quedarme en casa viendo películas de terror o algo por el estilo, porque los dos últimos años había ido con pareja y bueno, los anteriores con Oliver, eran como demasiados recuerdos que no quería pasar sola, entonces sonreí – Seria un honor ir contigo al baile de nuevo – dije para luego beber un poco mas del refresco.

Oliver abrió la boca como si estuviera sorprendido y se sintiera pasado a llevar al escucharla, negó con la cabeza divertido, esperando que al apenas comenzara a hablar y la conversación cambiara de rumbo, dejara de pensar en todo lo que había pasado con ella en la fiesta de graduación, diablos el mismo había sido el idiota de sacar el tema a colación, ahora tenia que aguantarse las imágenes mentales, no le quedaba de otra.

-Nada de…”Es un honor”, es tu obligación-le dijo divertido mientras se apoyaba en la mesa para mirarla fijamente mientras susurraba, era mejor prevenir que curar, aunque no veía al padre de Julie cerca-Porque, el ultimo baile, si la memoria no me falla, por primera vez en todos los años que he vivido aquí, no lo pase bien. Sino que tenia que vigilar que mi pareja y mejor amiga, no le vomitara encima a nadie ¿Te suena algo de eso?-le dijo riendo suavemente para separarse y apoyarse nuevamente en el respaldo de la silla. Bien, irían juntos al baile…solo que esperaba que no terminara como el ultimo baile al cual habían ido…o en el fondo ¿Si lo esperaba? Bahhh…aun no lo decidía.

Fingí una mirada fulminante dirigida a Oliver cuando dijo que era mi obligación, pero termine riéndome de aquello, en el fondo era como una obligación moral para mi misma, él había vuelto y las cosas mas o menos volvían a colocarse donde estaban antes de su marcha, aunque quizás no todo seguiría en el mismo lugar, si no recordaba mal había pintado mi habitación, menudo cambio drástico…

- Vamos Oliver, no vomite hasta llegar a casa, si, vale, no llegue al baño, pero no vomite encima de nadie – dije riendo después, aunque susurre al igual que él, no tenia demasiado claro porque susurrábamos, ah, si, mi padre, el cotilla mas grande del local en ese momento – Bueno, entonces al baile … - dije pensando unos segundos, dejando el baile aparte – Tu madre te ha echado mucho de menos – murmuré mirándole, la verdad había pasado bastante tiempo con ella y mi madre, me sentía algo rara estando con ellas, pero supongo que era un modo de acordarme de Oliver cuando no estaba, ya que su madre no dejaba de hablar de él cada segundo y así me enteraba de cómo le iba en estados unidos.

Vale no había vomitado hasta llegar a casa, pero había estado a punto de hacerlo en varias ocasiones, pero de todas formas Oliver continuo en silencio, solo la observo con aquella sonrisa cómplice mientras se terminaba su refresco con una sonrisa, dejando con un ruido seco el vaso sobre la mesa, tenia esa costumbre cuando Julie estaba tras la barra, ese era el sonido para hacerle saber que era hora de que se tomara un descanso y se sentara con el.

Bufo ante la mención de su madre, pero la sonrisa no desapareció de su rostro-Mi madre me extrañaría si desapareciera por dos horas, Julie-dijo como si aquello fuera obvio. Pero en el fondo estaba conciente de que había sido duro para ella dejar a su único hijo partir, no sabía como su madre podía amarlo demasiado. No la hubiera culpado si lo odiaba, porque su nacimiento había sido el culpable de que su padre la abandonara, pero no era lugar ni momento para ponerse a pensar en aquellas dudas existenciales. Comenzó a hacer dibujos con uno de sus dedos, antes de recordar algo. Elevo la mirada rápidamente y estiro una de las manos para llegar hasta Julie, tomo el cabello que cubría una de sus orejas y la hizo que ladera un poco la cabeza-Quería saber si seguía ahí-dijo riendo suavemente, alargando el contacto de su mano contra el cuello de la muchacha mas de lo necesario, cuando se dio cuenta de aquello, aparto la mano rápidamente.

Reí levemente, asintiendo ante aquello, era cierto, la madre de Oliver le echaba de menos hasta cuando se iba a clase en nuestra época de instituto, pero podía llegar a entender el porque, era como lo único que tenia seguro a su lado, su apoyo, y su hijo, era normal que quisiera sentirle cerca, la verdad a veces sentía algo de rabia por lo que había pasado con su padre, me lo había contado mi madre hacia ya años y bueno, el tema había salido muchas veces con Oliver, supongo que era normal querer desahogarse.

Cuando hizo aquello, lo de apartarme el cabello no estaba segura de para que hasta que hablo y sonreí, se refería al tatuaje, el cual se podía decir que me había echo para impresionarle después de que él se hiciera el suyo – Si, creo que me dijeron que duraría para siempre – dije con una sonrisa mientras la mano de Oliver seguía en mi cuello y luego la aparto rápidamente, cosa que hizo que yo también me diera cuanta de que quizás la había tenido allí demasiado tiempo, volví a ponerme el pelo como antes – Pero ya sabes, intento no llevar el cabello recogido, a mi padre sigue sin gustarle - dije sonriendo

Oliver se llevo la mano hacia debajo de la mesa, mientras la abría, como si el taco de la piel de Julianne hubiera quemado, negó con la cabeza, seguramente estaba perdiendo la razón y ni cuenta se había dado. Alzo una ceja divertido al escucharla, si, los tatuajes duraban para siempre y dolían como el demonio, cuando ella le había dicho que se haría uno, dudo que fuera capaz de resistir el dolor, pero como siempre Julie lo había sorprendido.

-Tu no estabas cuando descubrió mi tatuaje, casi me saca del equipo-Rió recordando cuando estaban en los vestuario y el se había quitado la camisa para ducharse, a el entrenador casi le había dado un ataque cardiaco. Es que el tatuaje de Oliver era mucho mas grande, mucho mas llamativo, aunque a el siempre le había gustado y demasiado el tatuaje de Julie, era delicado, como la dueña.

-Me alegra estar de vuelta…quizás no todo sea tan malo después de todo-agrego luego de unos minutos en silencio, elevando la mirada hacia ella. Sospechaba que le gustaba aquel reencuentro con su pueblo natal por una persona en particular, pero ni siquiera quería decirlo en voz alta, seria mucho más real, mucho mas raro y demasiado mas complicado.

Solo de imaginar a mi padre, gritándole a Oliver en medio del vestuario volvía a hacer que me riera, si, Oliver ya me había contado aquello, pero bueno, seguía pareciéndome tan gracioso como el primer día, era extraño ver a mi padre gritar por algo, aparte de en los partidos y entrenamientos, o a mi cuando quise entrar en el equipo de hokey, Oliver estaba delante ese día, intentando ayudarme, aunque no funciono de mucho por no decir de nada, así que había terminado como las demás chicas en el equipo de patinaje artístico, cosa que resulto dárseme genial, pero termine dejándolo después del instituto, aunque aun que no quisiera admitirlo, al tener las llaves de la pista gracias a mi padre solía ir de vez en cuando a recordar los viejos tiempos en la pista.


- Me alegro de que te alegres – dije sonando algo tonta, pero era cierto, no iba a decir en voz alta te he echado de menos, al menos no por ahora, sentía que si lo decía seria como si perdiera en una competición que tenia conmigo misma, pero lo sabia, le había echado muchísimo de menos. Entonces fue cuando escuche la voz de mi padre, la gente empezaba a entrar, ya era la hora de cenar mas o menos, y los que estaban sin una mujer en casa pasaban por aquí a ver si les alimentábamos, miré a Oliver con el ceño fruncido, no tenia ganas de irme, pero dejar solo a mi padre delante de los fuegos de la cocina era algo que me asustaba y mi madre se había quedado en casa – Creo que tengo que… - dije haciendo una leve mueca mientras miraba de reojo a mi padre que seguía dando voces

Estaba acostumbrado a aquellos juegos de palabra por parte de Julie, mas bien le había sido raro no escucharla hablar de aquella forma que creía en ocasiones el era el único que entendía y podía descifrar. No le sorprendió para nada que minutos después todo el lugar comenzara a llenarse, era una rutina que nunca acabaría, cuando daban cerca de las siete, siempre el etnia que levantarse, le negaban pagar su bebida por mucho que insistiera y se despedía de Julie para dejarla trabajar con tranquilidad.

-Lo sé…creo que incluso hoy se han atrasado un poco-dijo riendo y viendo el reloj mientras se ponía de pie, con un poco de dificultad y esperaba que la chica se pusiera de pie también, caminaron a paso lento hasta la barra, el aun con su rodilla que lo hacia cojear, claro que Oliver había sido el terco que se había negado a usar muletas, pero eso lo hubiera restringido mucho mas y ahora también estaba mucho mejor.-Supongo que nos veremos mañana…pasa por la casa, veremos películas en el sótano y comeremos rosetas de maíz, como en los viejos tiempos-le dijo mientras le pegaba suavemente con un dedo en la punta de la nariz, sonrío mirando al entrenador que nuevamente los observaba, despidiéndose de el con un movimiento de la mano.

Me levante al mismo tiempo que él, mirándole de reojo y siguiendo su ritmo al caminar, me fastidiaba verle de ese modo, era extraño que él fuera el lento andando cuando ella era la que siempre tenia que pedirle que parara un poco incluso a veces, esas noches en que salían de fiesta con los demás había llegado a tener que llevarme a la espalda mientras yo dormía tranquilamente, la verdad echaba de menos esos momentos.

- Dalo por echo, aunque no se como estará tu sótano después de que tu madre lo remodelara – dije bromeando, sabia que su madre lo tenia como él lo dejo, creo que solo bajaba para limpiarlo, o eso me había comentado mi madre. Volví detrás de la barra, aunque no le deje de mirar hasta que se fue, mi padre me dio un golpecito en la cabeza para que empezara a ayudar de una vez, y eso hice, volver a la rutina después de aquella sorpresa.